CÓMO CURAR EL NIÑO INTERIOR

CÓMO CURAR EL NIÑO INTERIOR

Durante los próximos 28 días vas a restablecer la conexión con tu niño interior. Es posible que no te recuerdas como era verdaderamente o cuáles eran sus sentimientos, pero seguramente ella está bien guardada dentro de ti, esperando que a rescates cariñosamente. Tu niño no está necesariamente presente en tu vida actual, pero podrá estar mucho antes, en un lugar y en un tiempo donde sentía dolor, tristeza, soledad.

Ella es aquella parte que está sofocada, siente miedo, rabia o permite abusos en un nivel psicológico o físico, y que ahora, en tu presente, te hace sentir perdida y nostálgica, con un sentimiento de desprotección infantil.
Tales cicatrices espirituales sólo podrán ser curadas si extienden tus manos y abres tu corazón hacia ella, mimándola y dándote una oportunidad de comunicarte contigo. La energía de ella estará en tu cuerpo para siempre, así como el canal que te comunica con ella está ahí, listo para ser accedido.
Tal vez tu niño ya se haya manifestado en sueños o se refleja en la manera como tratas a tus hijos. Intenta interpretar de qué manera tu niño interior se está manifestando en tu vida y la abraza con amor, cura todas las heridas de ella y llena su pequeño corazón de alegría y seguridad.

Primera semana

Coloque una música instrumental, bien suave, y siéntese o acostarse donde parezca cómodo. Coloque las dos manos, una sobre la otra en el centro del pecho.
Se ve inspirando una luz rosada brillante y esparciendo esta iluminación por todo el cuerpo, llenando el corazón de luz y amor.
Busque el lugar donde está tu niño. Puede que esté dentro del armario, debajo de la cama, escondida entre los árboles o en la oscuridad de la habitación. Utilice la memoria y la intuición para encontrarla.
Acérquese, se siente con ella y apenas la escucha. No le diga lo que está mal, ni lo que debe hacer. Le permite expresar su cólera o su dolor, sin interferir, pero sólo enviándole su profundo amor.
Extender sus manos y acogerla en sus brazos. Añada sus cabellos, calma y transmite su afecto con dulzura cantándole una canción o expresando su amor en palabras susurradas.
Sería interesante anotar después de cada ejercicio todas las cosas que observó o sintió, así como las quejas y el comportamiento de su niño, pues son conexiones con su realidad actual. Aprenda con su niño en lugar de intentar enseñarle algo.

Segunda semana

Esta semana va al lugar donde tu niño se aísla y dígale que debe curar su dolor: "Mi niño, cuando te sanas, seré más libre, me sentiré más segura y más amada". Muestre a ella cómo esta tristeza estancada afecta su vida en el presente. Explique que ella estará siempre contigo y le promete que siempre volverá para que ustedes puedan compartir juntos sus momentos de alegría, felicidad o descubrimientos maravillosos. Aproveche esta semana toda para transmitir claramente a su niño, ya que puede ayudarle.
Busca dentro de ti las frases que necesitas decir al niño para que el proceso de curación ocurra en tu vida, pues nadie más conoce las necesidades de ella como tú.

Tercera semana

Regresa al rincón donde siempre encuentras a tu niño. Esta vez llevarás un consejero, tu Yo Superior y todos los gestos de cariño y la imagen mental de las personas que fueron amorosas contigo. Acuérdate de aquellas escenas vividas con la abuela, la madre, un hermano o una vecina afectuosa. Lleva todas estas energías amorosas contigo, permite que estos amigos invisibles formen un círculo alrededor del niño y la envuelvan con amor. Algunos tocarán su cabeza, su cara rosada o la tomar por las manos cariñosamente efectuando el trabajo de sanación.
Extiende el trato cariñoso a los seres que forman parte de tu vida en tu día a día.

Cuarta Semana

Vuelve al mismo lugar que te encuentras con tu niño interior llevando tu Yo Superior y nosotros. Estamos llegando al final del proceso de sanación y tú estás consciente de que hemos estado contigo y siempre lo estaremos.
Permite que tu Yo Superior concluya la curación y retire todo resquicio de dolor y dolor. Ahora está libre de toda pena, libera de todo el dolor.
Tan pronto como esto se haya hecho, permítete entregar a tu niño para nosotros, sólo para que se complete la curación. No tema, ella está segura y será muy bien cuidada.
Visualiza una bola de luz donde tu niño entra alegremente, esta esfera de luz que la envuelve somos nosotros; la llama del Amor Divino que todo puede curar.

Terapias de Apoyo

En caso de ser heridas difíciles de curar, busque ayuda con  Terapia Regresiva Reconstructiva, Terapia Gestalt, hipnoterapia, TVP (Vidas Pasadas), EFT, Terapia Transpersonal. 

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